Una bebida caliente y un bocadillo en la terraza de un café. Algo tan típicamente francés que es posible hacer a partir de este miércoles. Con muchas ganas de recuperar la normalidad, aunque sea a medias, este local lleva dos días de preparativos. Ante la aceleración de la vacunación y el descenso de los contagios, Francia está suavizando muchas restricciones, empezando por las comidas en el exterior, siempre que el tiempo lo permita.