El primer ministro británico, Boris Johnson, se defiende de la arremetida de su exasesor principal Dominic Cummings sobre la gestión de la pandemia. En su comparecencia ante la comisión de Sanidad de la Cámara de los Comunes, Cummings ha explicado que la llegada de la COVID-19 sumió al Gobierno en el caos, acusando al premier de ignorar inicialmente la gravedad de la crisis y de "fallar" a los británicos.